BARETO

Vuelve el bar de toda la vida 

Un plato de bravas en la barra junto a una caña “bien tirá”, taburetes de madera sin respaldo, como los de toda la vida, azulejos blancos en las paredes y una barra de mármol sobre la que gira todo el espectáculo. Vuelve la televisión para poder ver los partidos de futbol, las servilletas de papel y la clásica indumentaria del camarero con chaqueta de botones dorados. Sí, está en Madrid y es el nuevo must de la capital.

En Madrid sólo quedaban los clásicos e inmortales, como en la mayoría de las ciudades de España, estos si que son templos gastronómicos con historia. Abrir a estas alturas terminando el 2021 un bar de estas características es una declaración de intenciones, una vacilada hostelera. Pero si lo analizamos bien, se trata de un concepto necesario, el bar de toda la vida sólo tiene adeptos.

El nombre de Bareto describe perfectamente lo que podemos encontrarnos en este local situado entre la plaza de Cibeles y la puerta de Alcalá. Un bar de toda la vida adaptado a los tiempos que corren. Y eso sólo se consigue con buena cocina y con el toque del estudio de interiorismo Alejandra Pombo, quien ha sabido plasmar el concepto de un bar de toda la vida en el año 2021.

Un bocata de calamares actualizado, unos morros del Siglo XXI, las bravas 2.0 y un pincho de “matrimonio” que es imposible que se separe. Volver a tomar un buen caldo caliente, su pincho de tortilla o su montado de ternera. Que sabor auténtico en esta neotaberna donde se quiere dar más importancia al cliente y su disfrute que a todo lo demás. Es la carta perfecta para un aperitivo, para un día de cañas, para una cena con amigos, para ver el futbol como siempre se ha visto en un bar. Y entre tantos conceptos culinarios, de espectáculos, de cartas rebuscadas, de reservas imposibles, vuelve a estar “in” el concepto de toda la vida, el bar de siempre.

Para completar todo lo anterior, dispone de una imponente terraza donde no importa la época del año sino la ubicación y la orientación hacia la fachada del ayuntamiento de Madrid, la puerta de Alcalá a su izquierda y La Cibeles con el inicio de la Gran Vía al fondo. Es el escaparate perfecto.

 

 

¿Qué pedir?

Empezar con un matrimonio o la gilda

Imprescindible el flamenquin

La versión del bocata de calamares

Las bravas

Las alitas de pollo

Nos encantó el bocata de ternera

 

Precio Medio

20-25 euros persona

 

Ubicación

Calle Alcalá, 55, Madrid